En Soacha, política para parroquianos

Por Henry Barbosa

Según la Registraduría las consultas internas de los partidos tuvieron un costo cercano a los 20 mil millones de pesos, una cifra astronómica que en nada beneficia la democracia en Colombia.

Puestos de votación completamente desiertos, jurados de votación obligados a la tortura de esperar durante varias horas a algún despistado interesado en hacerle el favor a alguien, pero que en realidad ni siquiera sabe cuál fue el acto irresponsable que acabó de hacer.

En Soacha estas consultas son una vergüenza, los candidatos del Centro Democrático perfectamente  hubiesen podido disputar la candidatura en una misa campal. A quien se le puede ocurrir realizar unas votaciones pagadas por todos nosotros para que “solamente” unos cuantos iniciados, biblia en mano y/o reclutados en templos puedan elegir al candidato.

A su vez, la consulta del Polo Democrático Alternativo, fue totalmente al revés, todo el mundo podía votar, incluyendo miembros de otros partidos invitados a hacerle el favor al amigo militante. Hasta en Facebook se vio incluso como un conocido periodista “uribista” anunciaba públicamente su voto por su “amigo carnal” para que este fuera elegido.

Lo grave del caso, es que las votaciones no eran para escoger candidato, sino para elegir representantes a un Congreso. ¡Gajes de la democracia!

Pero como todo extremo es dañino, esto no se puede comparar con el acto oscuro, perverso y mafioso, como otros partidos escogen sus candidatos y podemos citar como ejemplo como un emporio de empresarios de la educación, un exalcalde preso y otro en ejercicio, escogen a dedo su representante en los próximos cuatro años.

Y qué decir del partido de la coalición nacional, donde el candidato sale de un juego de póker entre políticos corruptos que viven y negocian el presupuesto a miles de kilómetros de Soacha. Es decir, ni siquiera nuestros pusilamenes políticos locales escogen quien se lleva la marrana en el próximo cuatreño, sino que son Senadores, Representantes y Diputados de otros municipios y departamentos, quien a última hora escogen el candidato. !Apage y vámonos!

Otros instalan Directorio y muestran el ramillete de precandidatos, algunos de los cuales tienen doble representación, un pie izquierdo allí y el derecho en otro partido, por no decir del excalde preso que con precandidato propio juega a dos bandas. Un candidato así dinamita cualquier intento de alianza con ilusos alternativos.

Henrybarbosa@outlook.com

Abril 21 de 2015