Pasa el tiempo y entran en furor completamente las campañas políticas, el ir y venir diario de los candidatos trae como consecuencia algunos tras pies, que obviamente se disimulan muy bien, pues para eso están los grandes medios de comunicación, quienes en últimas son los que tienden una cortina de humo sobre la realidad, engrandecen, disimulan los errores y tratan de imponer sus candidatos aun a costa de la verdad y del interés general. Veamos pues algunos ejemplos recientes:
¿A como los tomates?
Gustavo Petro viene haciendo una sorpresiva campaña que lo ha posicionado como el más serio candidato a llegar a la casa de Nariño, sus impresionantes giras han despertado el fervor de un pueblo cansado de la politiquería, la corrupción y la barbarie en que nos han sumido los políticos y los partidos tradicionales.
Sin embargo, no todo es perfecto, sus largos discursos de más de tres horas terminan por aburrir y alejar a sus seguidores, todavía Petro no ha podido hilvanar un discurso corto, directo y fuerte, que reemplace los largos pasajes que en muchos casos lo sacan del tema y donde termina incluso describiendo como se hace el petróleo, o como es la transformación del carbón o como se produce la energía eólica, etc.
Hace uno días se transó en una fuerte discusión por las redes sociales contestándole a una calumnia de Héctor Abad, el consentido escritor de los medios. Un desgaste innecesario, ya que si Petro sale a agarrarse con cada sujeto que lo agrede, calumnia e insulta en las redes, algo que no tiene sentido porque lo pone al nivel simplemente de un verdulero y no de un estadista, que en ultimas es lo que necesita Colombia.
No se deja echar tierra
No fue sino que Gustavo Petro realizara las más grandes concentraciones políticas de esta campaña de 2018, para que su más serio rival, German Vargas Lleras y sus asesores empezaran a cranear la estrategia para bajarle el volumen a Petro.
Aun hoy es comentada la gigantesca concentración política realizada por Vargas Lleras en la ciudad de Cúcuta al mismo nivel de las que hacía Hugo Chávez en Venezuela y que dejan a las hasta ahora realizadas por Petro como meras piñatas.
Sin embargo, no todo es felicidad, una vez todo volvió a la normalidad se vienen a escuchar denuncias de pagos de 20 mil pesos a los asistentes, caravanas de buses trasladando gente como ganado, similar a lo que hacían hace varios años los paramilitares, música, trago, y sobre todo promesas de cedulación, y nacionalidad a todos los venezolanos ilegales que están en este lado de la frontera. Como quien dice: “Vamos con toda, sin importar como”.
Cerveza para la sed
Hace pocos días unos periodistas entre ellos Darcy Quinn, se burlaban de Humberto de la Calle, quien totalmente agotado después de una dura jornada proselitista se tomaba una cerveza en un establecimiento en Cali.
Para los medios coactados por Vargas Lleras y Uribe Vélez, todo los demás candidatos rivales deben ser destruidos de la misma manera como lo hacen con los anuncios apocalípticos sobre los Acuerdos de Paz.
Pues de la Calle ni corto ni perezoso utilizó la crítica de mala leche y la utilizó para hacer una pequeña campaña publicitaria al ritmo de una cerveza.
El candidato del Opus Dei
Algo que llamó rotundamente la atención fue porque los noticieros y periódicos no opinaron nada sobre las salidas en falso de Alejandro Ordoñez, el tenebroso magistrado y exprocurador, el mismo de las sentencias que legalizaron los “falsos positivos” en Colombia y el reintegro de militares corruptos como el extraditado Mauricio Santoyo, jefe de seguridad de Uribe Vélez.
En una fotografía se ve a Ordoñez caminando por los alrededores de la plaza de Mercabasto de Valledupar, y que increíblemente a diferencia de los grandes medios de comunicación que están pendientes de cualquier tontería que piensa y opina, en la plaza absolutamente nadie le pone atención. Al otro día los titulares fueron que las multitudes no lo dejaban caminar durante su gira por las tierras del vallenato.
¿El Castrochavismo presente en los supermercados colombianos?
Martha Lucía Ramírez inició su campaña política de la mano de Andrés Pastrana, y como su caballito de campaña es el “castrochavismo”, y “que nos vamos a volver como Venezuela”, pues arrancó precisamente desde el hermano país su camino hacia la presidencia.
Los medios sumisos viajaron con ella y cubrieron con grandes titulares su visita a algunos supermercados abandonados por sus dueños, los líderes de la oposición que deben estar escampando en Miami.
La foto frente a un escaparate vacío fue sublimizada por los periodistas colombianos, sin embargo, a la fecha todavía estamos esperando su pronunciamiento sobre las asonadas en los supermercados de Usme, Ciudad Bolívar, Melgar y Girardot. A lo mejor Pastrana y los que mandan sobre la candidata no se han puesto de acuerdo como contrarrestar este contratiempo.
¿A como los helados?
Otro que suena en los grandes medios de información es Juan Carlos Pinzón, quien durante el gobierno de Juan Manuel Santos era considerado el rey de la burocracia, ocupó los más altos cargos con avión privado, lujosos hoteles, viajes alrededor del planeta, pero que apenas empezó la campaña se volvió acérrimo enemigo de los Acuerdos con las Farc y empezó a despotricar de Santos.
Una fotografía en la que se ve íngrimamente solo durante su gira política por el Valle, en donde ni siquiera aparece su numeroso grupo de guardaespaldas, pone en duda el supuesto respaldo de las multitudes que siguen sus doctrinas políticas.
A los políticos no se les fía
Los maestros, los profesionales, los expertos en giras y quienes viajan permanentemente con periodistas expertos en merchandising es Álvaro Uribe Vélez y su candidato personal Iván Duque, por lo que sus reuniones políticas en contraste con los votos obtenidos al final siempre son un éxito total, así fue la campaña pasada donde Zuluaga perdió por poco margen y el “uribismo” obtuvo un gran número de Senadores.
Pero no siempre las cosas salen como se planean, y últimamente pueblo donde llegan es pueblo donde algunos valientes que no le tienen miedo a las motosierras le salen a gritar sus escándalos y corruptelas.
“Los médicos también se mueren” es una sabia frase que utiliza el pueblo colombiano, y que para Uribe y Duque les cae totalmente, durante su visita a Tunja fue recibido con gritos de “fuera…fuera…asesino…corrupto…” y demás, recibimiento que obviamente solo salió en las redes sociales y que fue ignorado por los grandes conglomerados periodísticos.
Pues bien, una vez abandonaron la ciudad, decenas de habitantes salieron a protestar porque según ellos fueron engañados y el dinero prometido por asistir a la manifestación de Uribe no les fue pagado y tuvieron que devolverse a pie, inclusive hasta su hogares.
Para algunos espectadores ajenos a las campañas políticas queda la pregunta: ¿La gira de Uribe incluye pagos a los que asisten y gritan vivas al candidato Duque? ¿Estos pagos están reportados ante la Registraduría? ¿Cuánto le pagaron a los que salieron a recibirlo en el parque principal de Soacha?