A los 86 años, falleció este sábado 23 de diciembre en la ciudad de Sincelejo el cantante Lisandro Meza, uno de los más grandes exponentes de la música sabanera, la cumbia y el porro colombiano.
El maestro Lisandro Meza, falleció en la Clínica Especializada La Concepción de Sincelejo, en donde estaba hospitalizado desde el 6 de diciembre.
Cabe recordar que se encontraba retirado de los escenarios desde que se inició la pandemia por el Covid-19, tras lo cual no volvió a actuar con su agrupación (Los hijos de la Niña Luz) con la que recorrió diversos países del mundo.
Maestro de maestros
Su trayectoria comenzó en 1954 en la finca de su padre, cantando y tocando varios instrumentos. Desde su infancia en el pueblo natal, Meza demostró un talento musical innato. A la temprana edad de 13 años, ya dominaba varios instrumentos, incluyendo el acordeón, el piano, la guitarra, entre otros. Fue en este período que se convirtió en el alma de las parrandas locales, cautivando a amigos y vecinos con su destreza interpretativa y la habilidad para tocar una variedad de géneros musicales.
A lo largo de sus más de 50 años de carrera, Lisandro Meza se consagró como una figura clave en el vallenato, explorando distintos estilos como la cumbia, el porro y el paseo. Su versatilidad musical quedó plasmada en los cerca de 110 discos que grabó, dejando una huella imborrable en la escena musical colombiana.
Conocido como “El Macho de América”, Meza participó en el Festival de la Leyenda Vallenata desde 1969, donde, a pesar de no obtener puestos destacados, conquistó los corazones del público, ganándose el título de ‘El Rey sin corona’. En 1975, obtuvo el segundo lugar en el festival y más tarde fue reconocido como “Rey Sabanero del Acordeón” en Sincelejo.
Lisandro Meza Márquez, nació en el corregimiento El Piñal, municipio Los Palmitos, Sucre, 26 de septiembre de 1937. Durante su larga carrera artística se distinguió como acordeonista, cantante y compositor, con más de 50 años de carrera musical en la cual grabó alrededor de 110 discos en diferentes ritmos: cumbia, porro, paseo y vallenato.
Entre sus éxitos más sonados se encuentran “Saludo”, grabada en 1959, canción que lo hizo muy popular.
Posterior a este le siguieron otros éxitos como “La gorra no se me cae” (1963), “La miseria humana” (1976), “Entre Rejas” (1977), “El guayabo de la ye” (1978), “Baracunatana” (1981) y “Estás pillao” (1982), canciones que en su mayoría se convirtieron en parte del folclor colombiano y son comunes en el conjunto musical Los Corraleros de Majagual desde 1961, con quienes participó en canciones como “Suéltala pa que se defienda”, “Hace un mes”, “La flaca de Vitola”, entre otras.
Lisandro Meza fue parte del icónico grupo Los Corraleros de Majagual, compartiendo escenario con destacados músicos vallenatos. Canciones como “Los sabanales”, “Senderito de amor”, “El hijo de Tuta” y “Para político no” se convirtieron en himnos que resonaron en todo el país.
A lo largo de su carrera, Meza recibió diversos apodos como “El Rey de la Cumbia”, “El Rey Sabanero del Acordeón”, “El Sabanero Mayor” y “El Sabanero del Acordeón”, reflejando el respeto y admiración que sus colegas y fanáticos le profesaban.
Lisandro Meza en 1965 formalizó su propio conjunto para amenizar bailes y fiestas tradicionales. Sin embargo, continuó integrando el grupo de Los Corraleros bajo la dirección de Manuel Cervantes y como acordeonista titular.
Compartió su vida artística con Los Coraleros del Majagual, de la que fue parte junto con Alfredo Gutiérrez, Calixto Ochoa, Eliseo Herrera, César Castro, Nacho Paredes, Lucho Argaín, Julio Herazo, Chico Cervantes, Rosendo Martínez, Enrique Bonfante, Tobías Garcés y Manuel Cervantes.