La Procuraduría General de la Nación confirmó, en decisión de segunda instancia, la destitución e inhabilidad general por el término de 20 años proferida en contra del sargento viceprimero Fabio Hugo Ortega Zapata y de los soldados profesionales Ismael Ruiz Quintero y Elvis Camilo Arce, por el homicidio de Mario Alexánder Arenas Garzón, perpetrado el 21 de febrero de 2008, en la vereda El Helechar, jurisdicción de Floridablanca (Santander).
De acuerdo con la investigación, adelantada en primera instancia por la Procuraduría Delegada Disciplinaria para la Defensa de los Derechos Humanos, los afectados por la sanción asesinaron a Arenas Garzón en estado de indefensión, y luego presentaron su cuerpo como el de un subversivo dado de baja en combate.
En el proceso disciplinario, el Ministerio Público determinó que los hechos no ocurrieron como lo manifestaron los uniformados, y que por el contrario la víctima fue llevada con engaños hasta el lugar donde ocurrió el crimen, fue reducido a la fuerza y finalmente recibió un disparo por la espalda, durante un supuesto encuentro armado que no existió y fue simulado con el objetivo de darle apariencia de legalidad al homicidio cometido.
Al dosificar la sanción, la Procuraduría calificó la conducta de los disciplinados como gravísima, a título de dolo, al incurrir en una grave violación al Derecho Internacional Humanitario, pues se trató de un homicidio cometido sobre un civil protegido por el DIH.
Mario Alexander Arenas Garzón de 33 años de edad, desapareció el 2 de enero de 2008 cuando salió de la casa de su hermana en Soacha hacía el domicilio de su mamá, en el barrio Quirigua, noroccidente de Bogotá, lugar al que nunca llegó.
La última vez que se tuvo noticias de él fue por una llamada telefónica que hizo a su mamá donde le manifestó que estaba trabajando.
Siete meses después, la familia de Arenas Garzón se enteró por un medio de comunicación que este había fallecido y que su cuerpo se encontraba en la ciudad de Bucaramanga. Allí un juez penal militar que adelantaba la investigación les manifestó que Arenas Garzón había muerto en un enfrentamiento con miembros del Ejército.
El informe de levantamiento del cadáver aseguraba que junto al cuerpo las autoridades habían encontrado un radio de comunicaciones, un fusil, una granada de fragmentación, proveedores y 17 cartuchos.
El caso de Mario Alexander Arenas Garzón forma parte de las más de 11 personas que fueron desaparecidos en Soacha y Ciudad Bolívar. “Casi todos eran desempleados o trabajaban en oficios como construcción y mecánica”, explicó el Centro de Investigación y Educación Popular (Cinep).