Reencarnar

Cuando muera, dejen libros abiertos sobre la mesa
para leerlos cuando regrese.

Cuando muera, dejen flores sobre la mesa
para regarlas cuando regrese.

Cuando muera, dejen un paquete de cigarros sobre la mesa
para fumarlos cuando regrese.

Cuando muera, dejen café tibio sobre la mesa
para beberlo cuando regrese.

Cuando muera, dejen hojas en blanco y un lápiz sobre la mesa,
para terminar este poema…
cuando regrese.

***“El poeta que murió joven y reencarnó en un libro”, Zuga Zucchini no vivió para ver su obra publicada, pero el libro “Un fusil cargado con versos”, de reciente aparición, recoge la lírica enérgica y contundente del poeta barranquillero.