Atlético Nacional ganó 2-0 al equipo mexicano Chivas de Guadalajara, y se coronó como ganador de la Super Copa de Campeones, en partido jugado en la Red Bull Arena, en el estado de New Jersey, Estados Unidos.
Los goles del triunfo de los «verdolagas» fueron obra de Luis Carlos Ruiz, al minuto 58, y de Dayro Moreno, por la vía del penal al minuto 82.
Fue un partido jugado con intensidad y que comenzó no solo con emociones en ambos arcos, sino también con preocupación por la lesión que sufrió Christian Mafla a los cinco minutos del primer tiempo luego de un fuerte choque con la zaga “rojiblanca”.
Al minuto 18, el defensa Esequiel Palomeque fue amonestado, minutos más tarde fue Hernández quien vio la tarjeta amarilla, mostrando que el partido se mostraba con sobresaltos en ambas escuadras.
Durante parte del primer tiempo se presentaron varias escaramuzas en ambas porterías, sin embargo, el gol no llegó, colombianos y mexicanos dejaron todo su fútbol para la etapa complementaria.
La segunda parte comenzó con mayor dominio del equipo antioqueño, toques cortos, sometimiento y posesión de la pelota, la base del estilo que Juan Manuel Lillo le quiere imponer a su equipo.
Al minuto 58 y tras un centro de Jhon Edison Mosquera, el samario Luis Carlos Ruiz pescó la pelota y decretó el primer gol de la tarde.
Pasaron varios minutos y los “verdes” querían aumentar la ventaja. A pesar de que Chivas despertó y por medio de Zaldivar inquietaba el arco de Vargas.
Al minuto 77, Lillo ingresó a Aldo Leao Ramírez, Jeison Lucumí y Dayro Moreno, cambios que generaron jugadas de peligro en el arco mexicano, sobre todo minutos más tarde cuando Ramírez ingresó al área y derivó su jugada en un penal que transformó en gol el tolimense Dayro Moreno.
El 2-0 fue un marcador benévolo para el cuadro mexicano, si se tienen en cuenta varias jugadas posteriores que pudieron llegar el tercero, cuarto o quinto gol de la tarde.
Al final, le permite al Atlético Nacional traerse a Colombia un nuevo trofeo y sobre todo, la confianza de volver al gol a pesar de no ser tan contundente.