A pesar de las evidencias médicas y científicas de las graves consecuencias en la población por la utilización del glifosato en las labores de aspersión aérea para la erradicación de cultivos ilícitos en Colombia, la comisión quinta del Senado hundió el proyecto de ley que buscaba prohibir el uso del glifosato en el país.
Con 9 votos a favor y 4 en contra, el Centro Democrático logró aprobar su proposición que pedía archivar este proyecto.
De nada valieron las explicaciones y presentación de estudios que abordaban los efectos del glifosato en la aparición de patologías de la piel, distintos tipos de cáncer, daños genéticos, respiratorios, reproductivos y neurológicos, entre otros.
No obstante, la evidencia sobre los daños posiblemente causados por el glifosato se sigue discutiendo en la comunidad científica
Durante este debate, varios congresistas dieron su opinión sobre esta iniciativa, el senador “uribista” Carlos Felipe Mejía, dijo que el incremento de los cultivos de coca se había evidenciado desde el Gobierno pasado y a causa de los acuerdos de paz, por eso era necesario mantener la estrategia que se había implementado en los últimos años, en la que se utiliza el glifosato.
Mejía sin embargo, no mencionó sobre el hecho que durante el Gobierno de Iván Duque, los cultivos de coca y marihuana han crecido de manera exponencial.
Uno de los autores de este proyecto, el senador del partido Alianza Verde, Antonio Sanguino, dijo que, según estudios internacionales, se pretende defender la salud de los campesinos y que en lo que se estipula en los acuerdos de paz se debe priorizar la sustitución de cultivos en la estrategia antinarcóticos.
“Hemos propuesto este camino en relación con la política antinarcóticos con la protección del ambiente, proponer esta prohibición para nada nos hace aliados del narcotráfico y del terrorismo(…) 7 relatores de la ONU, de medio ambiente enviaron una carta al presidente Duque en la que afirman que la propuesta del Gobierno de retomar las fumigaciones aéreas con el glifosato supone enormes riesgos para los Derechos Humanos y el medio ambiente”, explicó.