Después de la investigación de PETA, la Alcaldía de Cali multó el lugar por incumplir requisitos de salubridad y seguridad.
La Secretaría de Seguridad y Justicia de Cali selló el campus del Centro de Investigación Científica Caucaseco (Caucaseco) por no cumplir con las normas sanitarias y de seguridad.
Caucaseco fue el foco de una extensiva investigación adelantada por PETA, que ha derivado en la acción de autoridades colombianas y líderes locales. El sellamiento se dio semanas después de que la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca (CVC) incautara más de 100 monos de la Fundación Centro de Primates (FUCEP), un laboratorio aún financiado por los Institutos Nacionales de Salud de los Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés) y ubicado en el campus de Caucaseco.
“Mientras que los NIH financian inútiles y mortales experimentos en animales en el extranjero, los funcionarios colombianos han actuado rápidamente para cerrar estos centros de tortura», dice la Dra. Magnolia Martínez, Gerente Líder de Proyectos y Enlace para el Congreso de PETA. «PETA reitera su llamado a los NIH e instancias financiadoras en Colombia a dejar de desperdiciar recursos públicos en el financiamiento de estas organizaciones, e insta a la Alcaldía de Cali a rescatar de inmediato a los ratones y otros animales que aún están confinados allí”.
PETA se comprometió a donar 5.000 dólares para el cuidado de estos animales, una vez que sean transportados a un albergue de Cali.
Previamente, PETA presentó una queja ante los NIH y el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de los EE. UU. y les solicitó que dejaran de financiar a FUCEP y Caucaseco, y que investigaran a los experimentadores Sócrates Herrera Valencia y su esposa, Myriam Arévalo Ramírez, por aparente desvío de dineros públicos.
La investigación de PETA sobre Caucaseco y FUCEP reveló que los monos estaban confinados en jaulas asquerosas, rodeados de sus propios excrementos, y que eran alimentados con concentrado de perro remojado en agua de panela. Estos monos fueron infectados con el parásito de la malaria y su bazo fue extirpado quirúrgicamente. Algunos de ellos fueron abandonados a morir de heridas infectadas.
Herrera y Arévalo han publicado artículos con instituciones líderes en Colombia y otros países, incluidos el Instituto Nacional de Salud de Colombia, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU., el Centro Nacional de Investigación de Primates Emory, el Centro de Investigación del Cáncer Fred Hutchinson, la Escuela de Salud Pública Bloomberg de la Universidad Johns Hopkins, la Universidad de Washington, la Universidad de Montpellier y la Universidad de Lausanne, entre otras.
Los NIH gastaron 279 millones de dólares en 2022 en 742 proyectos de investigación en Colombia y otros 63 países, incluidos Bangladesh, Brasil, China y Vietnam. La agencia no tiene mecanismos de supervisión para las organizaciones extranjeras que reciben dinero de los contribuyentes estadounidenses.