Con un colorido desfile la Alcaldía celebró el cumpleaños 416 de la ciudad de Soacha.

Con un colorido desfile de casi tres horas, que recorrió la paralela y la carrera séptima y terminó en el Parque principal, la Administración municipal celebró el cumpleaños 416 de la ciudad.

El desfile contó con la activa participación del alcalde Eleázar González, todo el gabinete municipal, el nuevo obispo de la Diócesis de Soacha, Monseñor José Daniel Falla Robles, quienes no solo presenciaron el desplazamiento desde una tarima especial, sino que también encabezaron el desfile donde participaron unidades del Ejército y la Policía Nacional.

Y fueron precisamente uniformados de las dos instituciones los encargados de abrir la parada. Los militares reafirmando el compromiso con la paz y los Policías con la seguridad de la ciudadanía, que los premió con aplausos.

A continuación desfilaron en carrozas especialmente decoradas los funcionarios de la Alcaldía y con ellos aparecieron las figuras tradicionales como la emblemática figura del “Varón del Sol” y la gastronomía típica del municipio representada en las famosas “garullas”.

Poco a poco fueron apareciendo comparsas con zanqueros, bailes tradicionales llenas de música y hombres botando fuego por la boca, que levantaron los aplausos y la admiración de los presentes.

Entreverados entre las carrozas de las diferentes dependencias de la Alcaldía que formaron una fila multicolor, hicieron presencia las bandas musicales de algunas instituciones educativas del municipio, siendo ellas las encargadas de ambientar el “cumpleaños” del municipio.

De las carrozas que desfilaron llamó la atención la decorada por la Secretaría de Planeación quien hizo una alegoría a “Bachue” con una instalación del Salto de Tequendama.

El desfile cerró con las palabras del primer mandatario quien agradeció la solidaridad de todos los funcionarios con el cumpleaños de la ciudad, al mismo tiempo que lamentó la ausencia de los senadores especialmente invitados a la celebración.

La jornada terminó con la partida de la tradicional torta especialmente decorada con motivos alegóricos de la ciudad.