Darío Cabra: «El maestro Escobedo, merece nuestra gratitud, perenne, inmarcesible, y eterna»

Señor Licenciado

HECTOR PEÑALOZA CANTOR

Director de Cultura

SUACHA CUNDINAMARCA

Respecto de la LAMENTABLE salida del MAESTRO Guillermo Escobedo, de la Dirección de la Banda Sinfónica de nuestra Ciudad; permítame manifestarle, con todo el respeto que usted y la Administración Municipal se merecen, mi más profundo desacuerdo y protesta; si así se le quiere llamar, de la que sé es el sentir de muchos Suachunos, que hemos visto de cerca, por casi treinta años, el proceso de nuestra Banda Sinfónica, su trabajo y los maravillosos resultados que a lo largo de casi tres décadas, el Maestro ha logrado con su magnífica Dirección.

No puedo conformarme con un simple “Gracias Maestrazo” para esta persona que le ha dado lustre, brillo, honor y gloria, al nombre de nuestra amada ciudad, en ámbitos regionales, departamentales, nacionales e internacionales.

Recuerdo y me emociono nuevamente, como en una de tantas presentaciones maravillosas, gentes de diferentes regiones del país, en “El Retiro” Antioquia, ovacionaron con sincera emoción, la maravillosa interpretación de nuestra Banda Sinfónica, y el nombre de la querida Suacha resonaba en aquel lugar y muchos extranjeros entre el auditorio, aplaudían, aclamaban y preguntaban que era, donde quedaba SUACHA, con admiración y respeto. No éramos más epicentro de malas noticias; era el trabajo metódico, disciplinado, duro de un grupo de jóvenes bajo la batuta del Maestro Escobedo, quienes lograban para todos nosotros, tal reconocimiento; y episodios como éste, se repitieron para gloria de nuestra ciudad, muchas, pero muchas veces, en diferentes escenarios, en distintas latitudes.

Por todo esto, me resulta inquietante, por decir lo menos; que sea un concurso, más teórico que practico, de unas pocas horas, el que venga a convalidar cerca de treinta años de servicio exitoso, al frente de nuestra Banda Sinfónica, y toda una vida dedicada al estudio y ejercicio juicioso de la música.

Y digo “por lo menos inquietante” ya que sé y me anticipo a la reiteración de la respuesta a la inquietud planteada: “es que el cargo de Director de la Banda fue colocado en concurso” (sic).

Considero una falla, un gran error, que esas pocas horas de un concurso, como ya indiqué, más teórico que practico; determinen la salida de quien, con hechos y maravillosos resultados, demostró hasta la saciedad tener sobrados méritos, para continuar con la Dirección de la Banda. Y reitero el término “por lo menos inquietante” cuando sabido es, que, en la Administración Municipal, se han hecho ingentes esfuerzos ante la Comisión del Servicio Civil, para modificar, perfiles y requisitos en algunos cargos, con el propósito de que algunas personas puedan acceder a los mismos.

Entonces, porque no se privilegió la trayectoria demostrada de una persona que tanto honor y gloria le ha dado a la ciudad, con su talento, trabajo y capacidad, tantas veces demostrada; y más bien se le expuso al riesgo de un concurso de esta naturaleza, en el cual, dadas las características del mismo, eran muy previsibles los resultados. 

Por méritos, tiempo de servicio, resultados, experiencia, capacidad demostrada; había maneras legales de proteger la permanencia de un hombre al que la ciudad, el Alcalde, usted, yo y todos los ciudadanos, que decimos querer nuestra ciudad y “llevarla en el corazón” le debemos tanto; ya que enriqueció nuestro patrimonio cultural; el cual, estamos todos obligados a cuidar y proteger; ya que hace parte de nuestra identidad y nos genera y fortalece los sentimientos de pertenencia.

No tengo el privilegio de ser amigo del Maestro Escobedo, las conversaciones que he sostenido con él en cerca de veintidós años, que tengo de haberlo conocido, han sido muy pocas y muy breves, de muy pocos minutos; siempre para tratar temas relacionados con el bienestar de la banda, de sus integrantes, de los instrumentos; jamás para nada personal. Aunque hace varios años que no le veo, sé, por conversaciones con amigos y personas que le conocen; y presumo que ha de ser así; que Guillermo Escobedo está en el mejor momento de su madurez, como Maestro de Música; que aún tiene mucho por dar, por aportar, en beneficio de esta tierra generosa, a la que él tanto ha dado; más que lo que le han dado y aportado cualquiera de los hijos nacidos o acogidos en y por ella; aunque también es amparo de algunos ingratos.

Disculpe usted y quienes lean este escrito, por lo extenso del mismo, pero en verdad, no tengo otra forma de manifestar mi deseo, de alejarme de una de las expresiones más nefastas del ser humano, LA INGRATITUD; cuando no se reconocen los esfuerzos y sacrificios que implican trabajar y luchar por una causa, en la que después se te desconoce, en la que otros se benefician, pero creen agradecer, dando migajas, dando palmaditas en la espalda u ofreciendo un puño.

El MAESTRO Escobedo, merece nuestra gratitud, perenne, inmarcesible, y eterna; con su labor, ha escrito páginas que pasarán a la historia gloriosa de la cultura Suachuna, que solo el paso del tiempo y mentes más generosas, le darán el sitial que se merece; ojalá, vivamos, para contarlo.

Cordial saludo, su amigo

WILSON DARIO CABRA CRUZ

Ex alcalde de Soacha

Agosto 12 de 2019