Hombres armados a bordo de helicópteros sacrificaron a más de 5000 camellos en una operación de cinco días para evitar que los animales, sedientos por la ola de incendios en Australia, llegaran a las comunidades aborígenes. La matanza terminó el domingo en la región de Anangu Pitjantjatjara Yankunytjatjara (APY), una zona árida del sur de Australia donde viven unos 2.300 aborígenes, indicó el martes el director general de APY, Richard King.
Los aborígenes del Estado de Australia del Sur, donde está situada esta región, advirtieron de la existencia de grandes rebaños de camellos que se acercaban hacia las localidades rurales buscando agua y comida, en medio de una ola de calor sin precedentes. Los animales ponían en peligro la poca comida y agua disponibles en la zona y amenazaban las infraestructuras y a los conductores.
La medida quiere proteger «los valiosos suministros de agua para las comunidades» y aseguró que la prioridad «son las vidas de las personas, incluyendo niños y ancianos, así como la flora y la fauna autóctonas». Según el responsable aborigen, los camellos suelen quedarse atrapados en los pozos, donde mueren, y terminan contaminando el agua. Según la APY la operación supuso eliminar más de 5.000 camellos.
«Entendemos la preocupación de los defensores de los animales, pero existe una desinformación significativa sobre la realidad de la vida de los animales salvajes que no son nativos de esta zona, en uno de los lugares más áridos y remotos del planeta«, indicó King en un comunicado.
Australia vivió en 2019 su año más caluroso desde que existen registros, con una sequía extrema y una ola de incendios que ha devastado el sureste del país y todavía no ha terminado. Los camellos fueron introducidos en Australia por primera vez en la década de 1840 para participar en la exploración del interior del país y en las décadas siguientes se importaron unos 20.000 de India.
Actualmente, Australia tiene la mayor población de camellos del mundo, más de un millón, según algunos expertos. Los animales son considerados como una plaga porque contaminan las fuentes de agua y pisotean la flora en su búsqueda de comida.
¿Por qué en Australia están sacrificando a miles de camellos disparándoles desde helicópteros?
Las autoridades en Australia tomaron la drástica decisión de sacrificar unos 10.000 camellos en su plan para combatir la catástrofe ambiental que sufre el país.
El agua que toman los camellos y la sequía se convirtió en una pésima combinación, más aún en medio de los incendios que devoran amplías extensiones de tierra en el país.
El plan que dispusieron las autoridades es que cazadores profesionales sean los encargados de matar a los camellos a tiros. No será de cualquier forma: lo harán desde helicópteros. S espera que la operación se prolongue por varios días.
Fueron dirigentes aborígenes de los territorios de Anangu Pitjantjatjara Yankunytjatjara, al sur del país que han tomado esta medida extrema. Se justifican en preservar los acuíferos de los que dependen algunas comunidades.
Los camellos no son una especie nativa australiana y la sequía que sufre el continente los está impulsando a destruir cercados y aventurarse incluso cerca de núcleos habitados. Hay una feroz competencia por acceder al agua que está provocando estampidas que terminan con la muerte de algunos de ellos y sus cadáveres terminan contaminando ríos y lagos.
Actualmente hay más de 1.200.000 camellos salvajes. Además de beberse las reservas de agua, los camellos son bastante destructivos con su entorno. El gobierno australiano calcula en 10 millones de dólares anuales el daño que la especie ocasiona en vegetación nativa, humedales, fuentes de agua y lugares con valor histórico o cultural.
La medida tomada por las autoridades australianas desató toda una ola de protestas y críticas en todo el mundo, expertos ambientalistas y animalistas consideran que se debió implementar soluciones menos drásticas y no realizar el genocidio de esta especie animal.
Enero 20 de 2020