“El príncipe” de Soacha

Finalmente, quienes de pronto habían pensado que Saldarriaga terminaría su gobierno dejando un legado de obras se han equivocado. Nadie puede olvidar que Saldarriaga va por la revancha porque luego de cuatro frustrados intentos continuos por llegar al poder ambicionará quedarse en el poder durante mucho rato.

Por Ángel Humberto Tarquino

En la mayor demostración de habilidad y capacidad de manipulación del alcalde Saldarriaga sobre la masa, que raya con la violación de toda clase de normas , de su soberbia en el control y abuso explícito del poder, del mayor y más descarado derroche de los recursos públicos en logística para realizar un espectáculo circense que atenuara los graves cuestionamientos a su gobierno y los presuntos delitos de falsedad en documentos públicos de su marioneta Danny, es la demostración incuestionable de que el mandatario no escatimara escrúpulos ni recursos para imponer y prolongar su poder en cuerpo ajeno, acudiendo con desfachatez y cinismo a la máxima maquiavélica según la cual “El fin justifica los medios”.

La manifestación de altanería que suele exhibir el mandatario ante los medio de comunicación debe asumirse con beneficio de inventario toda vez que el acto político del pasado sábado, evidencia que la asistencia forma parte de los grupos de familiares y cercanos de la nómina paralela de la alcaldía, de las nóminas de los grandes contratistas de la administración (compañías de seguridad, de servicios generales) que se han visto obligados a contribuir con votos y dinero, de la nómina del IMRDS y los familiares de los profesores de las escuelas deportivas así como de la población beneficiaria de los programas sociales del gobierno de adultos mayores, madres gestantes, y programas de jóvenes en acción entre otros grupos sociales.

La poderosa maquinaria electoral que aceito cuidadosamente Saldarriaga durante su cuatrenio, le está permitiendo al gobernante colocar como aspirante a una figura cuestionada y además inepta pero sobre todo servil, que cumplirá a cabalidad sus designios sin importarle sus consecuencias porque saben que el sistema judicial como el disciplinario y fiscal son fácilmente sobornables para que cualquier investigación que se abra sobre sus actuaciones administrativas sea archivada por falta de pruebas, por vencimiento de términos o por cualquier otra razón similar y todo quede cubierto por el manto de la impunidad.

Como si no fuera cierto, bajo estas premisas el amo y su siervo han desestimado y puesto en duda la veracidad de las denuncias y evidencias existentes al respecto para tratar que se produzcan desde el ámbito judicial decisiones que favorezcan y legitimen sus actuaciones.

Finalmente, quienes de pronto habían pensado que Saldarriaga terminaría su gobierno dejando un legado de obras se han equivocado. Nadie puede olvidar que Saldarriaga va por la revancha porque luego de cuatro frustrados intentos continuos por llegar al poder ambicionará quedarse en el poder durante mucho rato.

Frente a esta pretensión que se hace cada vez más viable en virtud de su perversa estrategia electoral logró, como lo enseño Maquiavelo, dividir a sus oponentes para gobernar en cuerpo ajeno, y como si fuera poco, dicha posibilidad está cada día más cerca fortalecida por la atomización que produjo en las otras maquinarias de la derecha que suelen disputarse el poder local.

En este sentido no se vislumbra la posibilidad real de que se produzcan renuncias, alianzas y acuerdos burocráticos en razón de los exagerados egos de sus líderes que, anteponiendo el interés particular, sacrifican el interés general y las prontas soluciones de las necesidades más apremiantes de los ciudadanos.

Pero no todo es pesimismo. Poco a poco y con el paso de los días, una campaña que aunque modesta en recursos pero creativa en ideas, en trabajo colectivo y esfuerzo, en compromiso y disciplina, se afianza y se gana el favor de los ciudadanos por sus propuestas no solo programáticas sino también para la idoneidad, transparencia ética y moral de sus lideres y aspirantes a la alcaldía del PACTO HISTORICO Heiner Gaitán Parra y a sus aspirantes a la Asamblea, Concejo y Juntas Administradoras Locales. EL TIEMPO ES AHORA¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
ahtarquinog@gmail.com

*Las opiniones expresadas en este artículo de opinión son del autor y no de SOACHA ILUSTRADA.