Desde el pasado lunes 8 de noviembre, Estados Unidos implementó en sus requisitos migratorios los ajustes que deben cumplir los extranjeros que deseen ingresar al país.
Los pasajeros extranjeros no residentes que lleguen al país por vía aérea deberán presentar evidencia de su esquema de vacunación completo –certificado o carné emitido por una entidad gubernamental– que incluya los datos de identificación personal, y una prueba de COVID-19 negativa (PCR o antígenos), realizada dentro de los tres días previos al inicio del vuelo.
Las vacunas aceptadas para ingresar son las autorizadas por la FDA y la Organización Mundial de la Salud (OMS): Janssen/Johnson & Johnson, Pfizer-BioNTech, Moderna, AstraZeneca, Sinovac, BIBP/Sinopharm y Covishield.
Los viajeros que no estén completamente vacunados –ya sean ciudadanos estadounidenses, residentes legales o miembros de los grupos de excepción– deben presentar una prueba de COVID-19 negativa realizada 24 horas antes de su vuelo.
Por otra parte, quienes hayan tenido COVID-19, pueden presentar documento de recuperación con un test positivo de no más de 90 días previos al vuelo y una carta firmada por un profesional de la salud constatando que la persona ha sido autorizada para viajar.
Además de estos requisitos, todos los pasajeros deberán llenar un formulario para confirmar la autenticidad de su documentación en cumplimiento con las medidas establecidas. Este formulario puede descargarse en el sitio web del CDC de los Estados Unidos.
La aerolínea verificará toda la documentación exigida a los pasajeros y denegará el abordaje a quienes no la proporcionen.
Avianca opera actualmente alrededor de 180 vuelos semanales a nueve destinos en los Estados Unidos, entre los que se encuentran Miami, Orlando, Nueva York, Washington, Dallas, Houston y Los Ángeles.