EPS le deben 148.000 millones de pesos al Hospital Cardiovascular de Soacha

En declaraciones a medios de comunicación, el médico Ciro Olaya Forero, director General del Hospital Cardiovascular del Niño de Cundinamarca, ubicado en el barrio San Mateo en la ciudad de Soacha, informó que al hospital las EPS le deben, por conceptos de tratamientos y procedimientos a sus pacientes, 148.000 millones de pesos.

El hospital Cardiovascular, es una institución prestadora de servicios de salud de mediana y alta complejidad, siendo uno de los más especializados del país en cardiología, en él se realizan procesos complejos como inserción de válvulas a niños vía catéter, operación de corazones malformados y trasplantes de dos órganos al tiempo.

El doctor Olaya, cardiólogo de 62 años formado en Francia, resume la crisis financiera a que se ve abocado el hospital por el no pago de los servicios prestados a los afiliados de las EPS, “Esto es una constante lucha para alcanzar el equilibrio financiero”, dice.

Doctor Ciro Olaya Forero

La situación es reiterante, en el 2015, una situación similar se presentó, en ese entonces, las EPS le debían cerca de $200.000 millones al hospital.

“Aunque entre 2015 y 2019 sí hubo una reacción de pagar, el problema se mantuvo con la liquidación de las EPS que quedaron con la deuda pendiente”, afirma el doctor Olaya, quien se refiere a la liquidación de Saludcoop y Cafesalud, y que según la Asociación Colombiana de Hospitales y Clínicas (ACHC) dejaron en todo el país montos sin pagar de $502.769 millones y $208.633 millones respectivamente.

Aunque el Hospital Cardiovascular nunca tuvo contrato con estas EPS, sí atendió a sus remitidos. A la fecha, después de conciliaciones y refinanciamientos de deuda, Saludcoop les debe 4.092 millones de pesos y Cafesalud, 7.826 millones.

Olaya es optimista que estos casos tengan pronta solución, en especial con lo prometido en el Acuerdo de Punto Final, paquete de medidas económicas del gobierno de Iván Duque que busca sanear las deudas históricas que existen en el sector de la salud, garantizando el financiamiento del sistema de salud y generando mayor liquidez.

Mientras esto ocurre, las directivas del hospital han contemplado otras posibilidades para alcanzar el punto cero, e incluso buscar el desarrollo de sus servicios.

Nos llama la atención la idea de ser una fundación. Para que los privados que quieran invertir y apoyar tengan la seguridad de que lo que ponen se usa con la población más vulnerable”, admite Olaya.

El Hospital Cardiovascular del Niño ha procurado mantener la atención de calidad para sus pacientes, no solo de Soacha, el municipio más poblado del departamento, sino también de las provincias de Tequendama y Sibaté, e incluso algunos que vienen remitidos de otros centros de salud de Bogotá y pacientes vulnerables de otros países que buscan un tratamiento.

Diciembre 22 de 2019