Fotografías inéditas del magnicidio de Luis Carlos Galán

El pasado 5 de diciembre la revista Semana publicó un artículo titulado “La imagen secreta del asesinato de Luis Carlos Galán”, en cuya nota se hace referencia a una antigua fotografía tomada instantes antes de ocurrido el magnicidio de Luis Carlos Galán en el municipio de Soacha.

En la fotografía presentada por Semana se observa un hombre de traje azul que aparentemente manipula una cámara de video y en la que se aprecia que debajo del saco del traje, el hombre lleva un arma en su cintura.

La revista Semana asegura igualmente que a un costado de la tarima permanecía un sicario con una ametralladora oculta, esperando rematar al candidato presidencial.

26 años después siguen apareciendo hipótesis sobre lo que ocurrió realmente cuando en la plaza principal de Soacha fue asesinado el candidato presidencial Luis Carlos Galán.

Esta imagen que para la revista Semana “ha permanecido inédita durante 26 años”(sic), es conocida ampliamente en el municipio de Soacha, inclusive en un homenaje del aniversario del magnicidio circularon varias copias para la venta. En la margen izquierda de la fotografía aparece la leyenda “Cortesía de Gonzalo Alonso”, no hay certeza que se refieran a los hermanos Gonzalo Rodríguez Chía y Alonso Rodríguez Chía, fervientes seguidores de Galán. En la parte derecha de la imagen aparece un hombre quien carga efectivamente una ametralladora, sin embargo, este sería del cuerpo de seguridad de Galán si se sigue la secuencia fotográfica del momento, hecho que no hicieron inexplicablemente los supuestos expertos consultados por Gonzalo Guillén.
Esta imagen que para la revista Semana “ha permanecido inédita durante 26 años”(sic), es conocida ampliamente en el municipio de Soacha, inclusive en un homenaje del aniversario del magnicidio circularon varias copias para la venta. En la margen izquierda de la fotografía aparece la leyenda “Cortesía de Gonzalo Alonso”, no hay certeza que se refieran a los hermanos Gonzalo Rodríguez Chía y Alonso Rodríguez Chía, fervientes seguidores de Galán. En la parte derecha de la imagen aparece un hombre quien carga efectivamente una ametralladora, sin embargo, este sería del cuerpo de seguridad de Galán si se sigue la secuencia fotográfica del momento, hecho que no hicieron inexplicablemente los supuestos expertos consultados por Gonzalo Guillén.
El hombre de seguridad que momentos antes aparecía a un costado cuando Galán subió a la tarima, aparece ahora subido sobre la antigua tarima de concreto de la plaza con la ametralladora en sus manos, es el momento justo cuando los asesinos cometen el atentado. Debajo de la tarima dos niños se tapan los oídos por el ruido de las armas, la multitud cercana a la tarima mira hacía el lugar de donde proceden los disparos, mientras varios cuerpos caen de la tarima entre ellos el de Julio Cesar Peñaloza vestido con traje negro.
El hombre de seguridad que momentos antes aparecía a un costado cuando Galán subió a la tarima, aparece ahora subido sobre la antigua tarima de concreto de la plaza con la ametralladora en sus manos, es el momento justo cuando los asesinos cometen el atentado. Debajo de la tarima dos niños se tapan los oídos por el ruido de las armas, la multitud cercana a la tarima mira hacía el lugar de donde proceden los disparos, mientras varios cuerpos caen de la tarima entre ellos el de Julio Cesar Peñaloza vestido con traje negro.
En la fotografía de José Herchel Ruiz se observa cuando el individuo de la ametralladora se desplaza hacia la multitud que por el ruido de los disparos huye despavorida. En el camino pasa muy cerca de los cómplices del asesinato de Galán que aún mantienen en sus manos la pancarta que sirvió para efectuar el atentado. No se entiende porque el uniformado que aparece de espaldas a la cámara y que paradójicamente también carga una ametralladora no actuó.
En la fotografía de José Herchel Ruiz se observa cuando el individuo de la ametralladora se desplaza hacia la multitud que por el ruido de los disparos huye despavorida. En el camino pasa muy cerca de los cómplices del asesinato de Galán que aún mantienen en sus manos la pancarta que sirvió para efectuar el atentado. No se entiende porque el uniformado que aparece de espaldas a la cámara y que paradójicamente también carga una ametralladora no actuó.
La fotografía anterior a la “inédita”(sic) de la revista Semana es esta en la que aparece el candidato al Concejo de Soacha Julio Cesar Peñaloza, animando a los asistentes, momentos previos a la llegada de Luis Carlos Galán a la plaza, Peñaloza murió en parte a causa de los disparos de los sicarios y la demora en recibir atención médica, a su lado aparece Jaime Bravo, locutor contratista de la Alcaldía de Soacha y quien falleció en 2003 debido a un cáncer provocado por haberse expuesto durante su infancia a los residuos de asbesto que dejaban los procesos de producción de la empresa Eternit en Sibaté.
La fotografía anterior a la “inédita”(sic) de la revista Semana es esta en la que aparece el candidato al Concejo de Soacha Julio Cesar Peñaloza, animando a los asistentes, momentos previos a la llegada de Luis Carlos Galán a la plaza, Peñaloza murió en parte a causa de los disparos de los sicarios y la demora en recibir atención médica, a su lado aparece Jaime Bravo, locutor contratista de la Alcaldía de Soacha y quien falleció en 2003 debido a un cáncer provocado por haberse expuesto durante su infancia a los residuos de asbesto que dejaban los procesos de producción de la empresa Eternit en Sibaté.

Fotógrafos y fotografías

Igual como sucedió con el magnicidio del presidente norteamericano John F. Kennedy, aún siguen apareciendo fotos de los sucesos del 18 de agosto de 1989 cuando fue asesinado Luis Carlos Galán. En esta imagen se ve cuando Galán hace su arribo a la plaza de Soacha, instantes antes de su asesinato, a un costado de Patricio Samper y Germán Vargas Lleras, aparece un fotógrafo ocasional. Por su ubicación, sus fotografías estarían enfocando el lugar donde estaban ubicados los asesinos de Galán.
Igual como sucedió con el magnicidio del presidente norteamericano John F. Kennedy, aún siguen apareciendo fotos de los sucesos del 18 de agosto de 1989 cuando fue asesinado Luis Carlos Galán. En esta imagen se ve cuando Galán hace su arribo a la plaza de Soacha, instantes antes de su asesinato, a un costado de Patricio Samper y Germán Vargas Lleras, aparece un fotógrafo ocasional. Por su ubicación, sus fotografías estarían enfocando el lugar donde estaban ubicados los asesinos de Galán.
En esta secuencia, Galán inicia su camino hacia la tarima, mientras el fotógrafo ocasional pasa por delante de Samper y Vargas, aun con la cámara fotográfica en sus manos. Se desconoce las imágenes que tomó este fotógrafo ocasional.
En esta secuencia, Galán inicia su camino hacia la tarima, mientras el fotógrafo ocasional pasa por delante de Samper y Vargas, aun con la cámara fotográfica en sus manos. Se desconoce las imágenes que tomó este fotógrafo ocasional.
Pero de si de fotografías ignoradas se trata, queda esta cuando un escolta se arroja sobre el interior del auto en marcha que lleva a Luis Carlos Galán a un centro médico, Patricio Samper mira absorto la escena. A sus espaldas nadie repara en el hombre arrodillado que lleva un sombrero similar a los usados por los sicarios y que vestía una camisa de climas cálidos en el frio ambiente de una noche soachuna.
Pero de si de fotografías ignoradas se trata, queda esta cuando un escolta se arroja sobre el interior del auto en marcha que lleva a Luis Carlos Galán a un centro médico, Patricio Samper mira absorto la escena. A sus espaldas nadie repara en el hombre arrodillado que lleva un sombrero similar a los usados por los sicarios y que vestía una camisa de climas cálidos en el frio ambiente de una noche soachuna.
Mientras Galán es llevado a un centro médico, Julio Cesar Peñaloza trata de ser reanimado en medio de la calle, sus auxiliadores ya lo han despojado del saco y piden angustiados ayuda para su traslado.
Mientras Galán es llevado a un centro médico, Julio Cesar Peñaloza trata de ser reanimado en medio de la calle, sus auxiliadores ya lo han despojado del saco y piden angustiados ayuda para su traslado.
La misma camioneta que sirvió para transportar a Luis Carlos Galán hacia la plaza principal, también sirvió de parapeto a los asistentes que huían despavoridos ante los disparos de los sicarios.
La misma camioneta que sirvió para transportar a Luis Carlos Galán hacia la plaza principal, también sirvió de parapeto a los asistentes que huían despavoridos ante los disparos de los sicarios.
Desde muy temprano decenas de personas se desplegaron por todo lo largo de la carrera séptima de Soacha, a la espera de la llegada del candidato presidencial Luis Carlos Galán.
Desde muy temprano decenas de personas se desplegaron por todo lo largo de la carrera séptima de Soacha, a la espera de la llegada del candidato presidencial Luis Carlos Galán.
En la plaza principal la multitud esperaba pacientemente la llegada del candidato presidencial, alrededor de la antigua tarima de cemento no se observaba a nadie con los sombreros característicos que utilizaron los asesinos de Galán para identificarse entre ellos.
Alrededor de las siete de la noche varias delegaciones empezaron su lento desfile hacia la plaza principal de Soacha. Nadie imaginaba la tragedia que ocurriría después.
En la plaza principal la multitud esperaba pacientemente la llegada del candidato presidencial, alrededor de la antigua tarima de cemento no se observaba a nadie con los sombreros característicos que utilizaron los asesinos de Galán para identificarse entre ellos.
En la plaza principal la multitud esperaba pacientemente la llegada del candidato presidencial, alrededor de la antigua tarima de cemento no se observaba a nadie con los sombreros característicos que utilizaron los asesinos de Galán para identificarse entre ellos.

ACLARACIÓN

SOACHA ILUSTRADA es un medio de comunicación que es reconocido a nivel nacional por sus investigaciones sobre la historia del municipio de Soacha y que no tiene nada que ver con el grupo interesado en escribir “la historia ilustrada de Soacha”(sic) que menciona el artículo de Semana.

Las informaciones de SOACHA ILUSTRADA son directas y públicas, y nunca acostumbra a pedir el anonimato en ninguna de sus publicaciones, aunque respeta que a la revista Semana “fuentes de Soacha pidieron no ser identificadas por considerar que el magnicidio de Galán continúa siendo un tema en extremo peligroso”(sic).

Esta aclaración se hace debido a que días pasados un enlace inconsulto de la revista Semana de un artículo de SOACHA ILUSTRADA, a raíz del grave atentado que destruyó el Juzgado Primero Civil del Circuito, ocasionara múltiples amenazas de muerte al editor de este medio de comunicación, hecho que lo llevó a abandonar el municipio de Soacha.

Diciembre 12 de 2015

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