Hospital San Juan de Dios abrirá nuevamente sus puertas a finales de 2012

El Hospital San Juan de Dios reabrirá sus puertas con un remodelado Centro de Salud y Desarrollo Humano.

El secretario de Salud de Bogotá, Guillermo Alfonso Jaramillo, anuncio que a fin de año reiniciará atención el centro de Salud y Desarrollo Humano del Hospital San Juan de Dios, cerrado desde hace 12 años.

El centro completamente remodelado brindará atención en salud mental, cáncer, tórax, biotecnología, enfermedades crónicas y discapacidad.

La administración distrital pretende convertir el hospital en un centro de salud pública preventiva en donde la investigación y la innovación científica sean los ejes centrales.

Con esto el alcalde Gustavo Petro cumplirá una de sus promesas de campaña: salvar el Hospital San Juan de Dios, pues según él, no es posible que una ciudad como Bogotá, no tenga un solo hospital público capaz de hacer trasplantes de órganos, capaz de investigar y que sea una escuela de médicos.

Ante el anuncio de la Secretaría de Salud de Bogotá de reabrir el centro de Salud del Hospital San Juan de Dios, inmediatamente se desató una fuerte polémica en la gobernación de Cundinamarca.

El gobernador Álvaro Cruz asegura que, esto no será posible hasta cuando  no se resuelvan aspectos legales y financieros, la razón, es que el hospital está en proceso de liquidación y no lo administra la Beneficencia de Cundinamarca, propietaria del complejo, sino un gerente liquidador nombrado desde 2006, en cumplimiento de una sentencia (484 del 2005), que regula la liquidación del San Juan de Dios.

La gobernación de Cundinamarca cuestiona que el Distrito anunció la reapertura del centro de salud sin consultar el tema en la mesa de concurrencia, creada por orden de la Corte Constitucional para realizar la liquidación de la Fundación San Juan de Dios, y de la que hacen parte la Nación, la Gobernación, el Distrito y el liquidador. En esa mesa se vienen estudiando las reclamaciones laborales y pensionales, que se estiman en 1,6 billones de pesos, y que deben repartirse así: 50 por ciento la Nación y el resto en partes iguales entre Distrito y Cundinamarca.

El alcalde Petro anuncia la inversión de 7.000 millones para la reconstrucción del Centro de Salud y Desarrollo Humano del Hospital San Juan de Dios. Foto Henry Barbosa

Hace dos meses, el Distrito tomó posesión de las instalaciones del centro de salud, ubicadas en la esquina norte del complejo hospitalario y ya anuncia una inversión de 7.000 millones de pesos para rehabilitar y dotar el centro. La administración de Petro es tajante al señalar que los edificios del hospital no tienen nada que ver con la liquidación de la Fundación San Juan de Dios, ya que esta nunca fue dueña de los edificios. Legalmente el Distrito es dueño del centro por un comodato firmado en el año 1969, mediante el cual la Beneficencia de Cundinamarca le entregó a la ciudad, por 99 años los predios donde se construyó.

Historia

El Hospital San Juan de Dios era el más avanzado centro de investigación de la salud de Colombia. Su historia se remite  hasta los Reyes de España quienes lo crearon en la época de la colonia, en el funcionó la primera Facultad de Medicina, cuando se creó la Universidad Nacional en 1867. Durante el siglo XX fue epicentro de investigaciones científicas de punta, desarrolló su especialidad en traumatología y se convirtió en unidad piloto en toda Latinoamérica.

En el Hospital San Juan de Dios se atendió a la población más vulnerable del país, pero la corrupción, los políticos y el sindicato de empleados lo llevaron a la inviabilidad económica y al cierre fulminante. En el año 1999 los empleados dejaron de recibir salarios y en 2001 salió el último paciente. Durante 5 años estuvo en el limbo y después entró en una eterna liquidación.

Los trabajadores se acostumbraron a una vida de lucha y espera, y más de 70 familias se vieron obligadas a instalarse en el Hospital, entre salas de cirugías, consultorios psiquiátricos y laboratorios de patología, se hacinan sus ex empleados que se los tomaron con el juramento de quedarse allí hasta morir. Otros, siguen yendo día tras día a cumplir horario. Con el tiempo la situación quedó en el olvido, y desde entonces la ruina consume poco a poco al Hospital.