El coronel en retiro del Ejército Nacional Gabriel de Jesús Rincón Amado, condenado a 46 años de prisión por su responsabilidad en los asesinatos conocidos como los “Falsos Positivos” de Soacha, solicitó acogerse ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP).
Rincón Amado fue condenado en primera instancia por el Juzgado Primero Penal del Circuito Especializado de Cundinamarca por el asesinato de cinco personas del municipio de Soacha (Cundinamarca), en hechos ocurridos en agosto de 2008, crímenes que fueron declarados de lesa humanidad. Esta sentencia fue objetada por la defensa, revisión que actualmente cursa trámite en el Tribunal Superior de Bogotá.
Aunque la petición de libertad transitoria, condicionada y anticipada ha sido negada en dos ocasiones, la defensa del oficial volvió a radicar una nueva petición de esta libertad que permite la Ley de Amnistía, contando con concepto favorable del Secretario Ejecutivo de la Jurisdicción Especial para la Paz desde octubre del año pasado y la Corte Suprema de Justicia acaba de determinar que, por competencia, será el Juzgado 23 de Ejecución de Penas de Bogotá el que deberá definir si da o no el beneficio al oficial.
El caso del coronel Rincón Amado es de vital importancia, ya que dependiendo lo que disponga el Juzgado 23 de Ejecución de Penas de Bogotá, se sabrá si los responsables de los «falsos positivos» deben ser juzgados o no por la Justicia Especial de Paz (JEP), teniendo en cuenta que todos estos crímenes fueron declarados de lesa humanidad por la justicia.
Gabriel de Jesús Rincón Amado, exjefe de operaciones de la Brigada 15 del Batallón Contraguerrillas 96 en Norte de Santander, fue condenado a una pena de 46 años de prisión y una multa de 1.100 salarios mínimos.
Durante el juicio seguido en el Juzgado Primero Especializado de Cundinamarca fue hallado culpable junto con otros 20 exmilitares de los delitos de desaparición forzada, concierto para delinquir agravado y homicidio agravado.
Febrero 12 de 2018