Procuraduría formula cargos contra dos policías de Soacha por uso desmedido e irregular de la fuerza en la Universidad de Cundinamarca, sede Soacha

Un policía de Soacha apunta con un arma de fuego a un estudiante de la Universidad de Cundinamarca en Soacha (sept 4/2019).

La Procuraduría General de la Nación formuló cargos al teniente coronel (r), Alexander González Morenoquien se desempeñaba como jefe del Área Operativa del Distrito Especial de Policía Soacha, por presuntas actuaciones irregulares durante la protesta registrada el 4 de septiembre de 2019, en ese municipio, que terminó con un estudiante universitario herido por arma de fuego.

La decisión también cobija al patrullero, Nidier Nathan Delbasto Cortés, integrante de la Fuerza Disponible de Soacha.

Teniente coronel (r) Alexander González Moreno,

Según la investigación, durante las manifestaciones de estudiantes encapuchados de la Universidad de Cundinamarca, sede Soacha, por decisiones internas de esa institución, González Moreno permitió que personal que portaba armas de fuego participara en el procedimiento de control de los disturbios e ingresara a la universidad incumpliendo órdenes específicas del servicio.

Como consecuencia de esta situación, “se realizaron disparos que pusieron en riesgo la integridad de los estudiantes que no participaban en las protestas, de hecho, uno de ellos recibió un disparo en el muslo izquierdo y otros fueron ultrajados cuando se encontraban en los baños”.

El Ministerio Público señaló que, en la confrontación, el patrullero Delbasto Cortés habría ingresado voluntariamente a la Universidad de Cundinamarca con varios policías sin que mediara una orden para ello y sacó su arma de fuego y la accionó en varias oportunidades.

De acuerdo con las pruebas recaudadas, el uniformado aparentemente manipuló imprudentemente su pistola, es decir, actuó con culpa gravísima y, en consecuencia, habría incumplido reglas de obligatorio cumplimiento sobre el uso de las armas de fuego durante la prestación del servicio y el control de multitudes.

La Procuraduría calificó provisionalmente la conducta del teniente coronel (r) como grave a título de culpa gravísima y en el caso del patrullero como gravísima a título de culpa gravísima.