La estatua del torero César Rincón, que estaba ubicada afuera de la plaza de toros de Duitama (Boyacá) fue retirada en un acto de apoyo a la Ley Antitaurina, aprobada en el Congreso de la República el mes pasado.
La escultura, según el alcalde del municipio, de Duitama José Luis Bohórquez, será reubicada y en su lugar se instalará una plazoleta para mercados campesinos.
La senadora, Esmeralda Hernández, autora de la Ley contra las corridas de toros manifestó el hecho es un paso más para decir ‘No más olé’ en Colombia. “Hemos anunciado una convocatoria que va a permitir a todos los alcaldes de todos los municipios del país y que tengan plazas de toros, acceder a recursos para reconvertir estos escenarios en mercados campesinos para dinamizar las economías campesinas y populares”, dijo la congresista.
El acto se realizó con la aprobación del alcalde de Duitama José Luis Bohórquez y contó con la presencia del director de Prosperidad Social, Gustavo Bolívar y funcionarios del Pacto Histórico que insistieron que la actividad se realizó con respeto por la carrera del taurino, César Rincón.
Muchas personas se pronunciaron a favor y en contra de este acto. Los medios de comunicación bogotanos de extrema derecha una vez que se conoció el hecho, criticaron la acción diciendo que fue innecesario y que fue un acto de odio y maldad, teniendo en cuenta que el extorero “es uno de los hombres más famosos de Colombia en el exterior”.
Otros se manifestaron a favor del acto diciendo que César Rincón “Es uno los personajes más repudiados de la historia de Colombia; famoso por torturar y asesinar a puñaladas a miles de toros”.