Soacha tiene Política Pública de Juventud ¿En qué consiste eso?

La aprobación de la Política Pública de Juventud se convierte en un triunfo de diferentes sectores del mundo juvenil soachuno que durante años trabajaron para la consecución de dicho documento.

Por Heiner Gaitán Parra**

Un hecho que pasó inadvertido por las festividades de fin de año fue la aprobación por parte del Concejo Municipal del Acuerdo 31 del 20 de diciembre de 2018 que aprobó la Política Pública de Juventud. Un documento que sintetiza demandas de múltiples actores locales del orden juvenil a lo largo de veinte años y que hoy, pese a la administración de Eleazar González, es una realidad.

En reconocimiento a esos esfuerzos que por diferentes motivos no llegaron a buen puerto en dos décadas, un grupo de estudiantes soachunos integrantes al Grupo Presidencialismo y Participación de la Universidad Nacional y activos en los procesos de juventud del municipio- desde por lo menos una década- decidimos apostarle a la Política Pública como una forma de apoyar y promover las diferentes subjetividades locales que, desde lo juvenil, trabajan por una nueva Soacha.

La Convocatoria Nacional de Extensión Solidaria 2016 de la Universidad Nacional motivó a que los grupos de investigación presentaran proyectos en el marco de apostarle a la Paz Territorial y la participación comunitaria en el marco de los acuerdos de Paz que se lograron en La Habana (Cuba) y se ratificaron en el Teatro Colón de Bogotá. Precisamente en razón del punto 2 de los Acuerdos, el referido a la Participación Política, desarrollamos el proyecto. Argumentamos que el sistema político, para transformarse democráticamente, debe reconocer otras formas de participación política, papel que cumplen los movimientos sociales, los Grupos Significativos de Ciudadanos, las Plataformas Sectoriales, las Mesas Comunitarias, las Veedurías Ciudadanas, entre otras expresiones organizativas y políticas que coexisten en la sociedad civil colombiana

Sobre ese punto que se presentaba como modernizador del sistema político nacional es que se sustentó la necesidad de ofrecerle a las juventudes soachunas la posibilidad de contar con un espacio autónomo de interlocución la institucionalidad del municipio y de reconocimiento a sus más variadas expresiones. Es por ello que el Grupo de Investigación Presidencialismo y Participación se dedicó durante dos años a realzar un diagnóstico de lo que significa ser joven en Soacha –Suacha para algunos-, reconocer una historia no relatada alrededor de luchas que le han dado sentido a procesos juveniles y por fin darle al movimiento juvenil su Política Pública de Juventudes.

El proceso

Bajo la metodología de interacción entre la Investigación Acción Formativa (IAF) y la Investigación Acción Participativa (IAP) el Grupo de Investigación se desprendió de la perspectiva tecnocrática de construcción de Políticas Públicas, a partir de fuentes secundarias analizadas por tecnócratas alejados de la realidad social sobre la cual buscan incidir y configurar herramientas normativas. A diferencia de lo anterior, la IAF-IAP que se desarrolló en Soacha no quiso hacer distinciones entre quienes investigaron el fenómeno juvenil de la ciudad y diseñaron la propuesta normativa de la Política Pública y los procesos existentes en el territorio.

En consecuencia de lo anterior, las y los investigadores fuimos jóvenes de procesos que estábamos en procesos de carácter comunitario lo que facilitó la construcción temática de cada uno de los escenarios de encuentro, discusión y propuesta para construir la Política Pública. Los Encuentros fueron denominados Constituyentes, pues se apeló a la capacidad de los procesos en constituir la PPJ desde sus imaginarios, necesidades y quehacer, asimismo en la posibilidad de crear consensos que, a manera de pacto político, fuera refrendado en sendos espacios y se hiciera de obligatorio cumplimiento para la institucionalidad y sus funcionarios. Es decir, se subvirtió la lógica de subordinación de la comunidad al ámbito institucional.

La metodología de trabajo con los procesos juveniles se desarrolló con jóvenes de  los colectivos y parches, universitarios, de formación técnica, en centros religiosos, comunales, en condición de discapacidad y hasta en habitabilidad de calle en 10 ejes temáticos: Ambiente y Territorio; Participación Política; Convivencia para la Paz; Recreación y Deporte; Educación como herramienta de progreso; Trabajo digno para el desarrollo humano; Arte y Cultura como expresiones juveniles; Salud y Bienestar; Entorno Familiar amable y confiable; Integración e Inclusión. Cada proceso colectivo o participante desde su individualidad alimentó los ejes temáticos desde sus necesidades, posturas y propuestas para insertarlos en la PPJ. Cada eje temático se constituyó como Línea de Acción para la implementación de la Política Pública.

Las Constituyentes temáticas, al subvertir el ejercicio de construcción de este instrumento normativo, precisó un elemento contundente: las juventudes deben pasar de ser objetos de estudio y de acción institucional a ser actores que ocupen la centralidad en las decisiones público-políticas.

El documento final que se compuso de una Diagnostico sobre lo que significa ser joven en Soacha y la propuesta de articulado que posteriormente fue aprobado se constituyó a partir de 25 principios y 8 Enfoque de transversalización en cada una de las Líneas de Acción, atendiendo recomendaciones de la UNESCO, el Observatorio Juvenil de las Américas y los Observatorios de la Universidad Javeriana y la Universidad Nacional. Los Enfoques: de Derechos Humanos, Diferencial, Desarrollo Humano, Seguridad Humana, Territorial, Equidad de Género, Desarrollo a escala humana,  para la Paz y el Postconflicto se insertaron dentro del documento normativo.

Lo sobresaliente en la PPJ es la adecuación de un Sistema Municipal de Juventud que pretende distinguir entre la oferta institucional, denominado subsistema institucional (Oficina Juventud Generación de Paz, Programas oficiales, etc) y el subsistema de Participación, donde se incluyen las Asambleas Juveniles, la Casa de la Juventud, el Festival Juvenil, el Foro Anual de Diagnostico, la Plataforma Juvenil, entre otras herramientas a trabajar dentro de un Plan Decenal de Juventud.

La autonomía del subsistema de Participación se recrea en la medida de exigibilidad por parte de los procesos juveniles que deben entrar en dialogo con escenarios de participación como las representaciones escolares y las Juntas de Acción Comunal. Se aprobaron diversas herramientas de la participación juvenil que no pueden ser obviadas, en cada una de ellas reposa la potencia constituyente que se pretendió abordar en cada encuentro temático.,

Lo crítico

Sin duda, legamos una Política Pública de carácter progresista. Se reconoció la Ciudadanía Juvenil en Soacha, la pluralidad de actores en el marco de unas aspiraciones de largo plazo, saliendo de enfoques minimalistas y punitivos de entendimiento al joven soachuno desde el pandillismo, el embarazo adolecente y los Toques de Queda, lugares comunes desde donde la clase política lee lo que significa ser joven en Soacha.

A pesar de la buena disposición y trabajo del conjunto de funcionarios y contratistas del programa Juventud Generación de Paz, donde hicimos la alianza para sacar adelante el proyecto, no se puede decir lo mismo de Fidel Torres, secretario de Desarrollo Comunitario. Jamás creyó en el proyecto, a pesar de ser una meta dentro del Plan de Desarrollo Municipal, y su intención alrededor de no dar recursos para el diseño y ejecución de las Constituyentes, con el pretexto de escudarse en los recursos del Grupo de Investigación, indispuso siempre el ambiente, más cuando en dicha entidad se habla constantemente de prácticas clientelares que impiden que la administración pública y el servicio a la comunidad sea eficiente.

Ni que decir del Concejo Municipal, ni en la discusión en Comisión ni en la Plenaria de aprobación del documento, los concejales no tenían muy claro qué discutían, para qué discutían, sólo sabían que lo debía aprobar para cumplir con el Plan de Desarrollo. Bochornoso ver al concejal Plazas –ponente de chiripazo- de la PPJ hablando por hablar, equivocándose ampliamente, con un desconocimiento total de las dinámicas juveniles, por esa senda debatió el resto de la corporación. Ignorancia total sobre los asuntos ciudadanos.

Desde siempre supimos que, al igual que la Política Pública de Mujeres y la Política Pública Comunal, la de Juventud sería aprobada sin presupuesto. Aprobada por aprobar, para cumplir metas sin contenidos. Pero también sabíamos que una vez aprobada la PPJ ella se constituiría en una herramienta para incentivar la movilización social de las y los jóvenes del territorio, de sus procesos y subjetividades sociales en virtud del reconocimiento de una época de la vida humana que le es difícil entender a quienes manejan los asuntos públicos.

Ya aprobada la PPJ se necesita de un vigoroso movimiento juvenil exigiendo su financiación y el cumplimiento de cada uno de los puntos del documento. Esas luchas dependen de la autonomía de los procesos y de su interés en avanzar hacia la ciudadanía juvenil. Los procesos juveniles predecesores en Soacha –caso Red Juvenil- se distinguieron por marcar muy bien la línea de su autonomía respecto de la institucionalidad y sus agendas de movilización en exigencia de derechos. Considero que, en este punto de la historia, los actuales procesos juveniles no pueden quedarse atrás.

Conclusiones

  1. La aprobación de la Política Pública de Juventud se convierte en un triunfo de diferentes sectores del mundo juvenil soachuno que durante años trabajaron para la consecución de dicho documento.
  2. El éxito de la PPJ es parcial si ello no contribuye a incentivar la movilización juvenil en favor de otorgar un presupuesto adecuado a las demandas del sector.
  3. La existencia de la PPJ no puede leerse desde la cooptación o la violación de la autonomía de los procesos, por lo contrario es un documento garantista que busca proteger a los jóvenes y sus procesos de prácticas poderosas que buscan limitar su acción.
  4. Si bien es cierto que el objetivo central de las PPJ consiste en politizar a la juventud, ello no puede significar la mera politización por renovar a una clase política que le quedo grande la ciudad; la politización real consiste en apostarle a los procesos populares, comunitarios y a entender la movilización ciudadana como una dimensión de la política.
  5. En la medida que las organizaciones juveniles, amplias, autónomas, diversas, se reconozcan en un pluriverso de oportunidades ganadas al calor de la lucha social se garantizará la autonomía sobre procesos organizativos que responden al lucro y a la implementación de agendas que no corresponden a las de las y los jóvenes.
  6. Defender la PPJ es un deber y a la vez una necesidad. Defenderla de los enfoques minimalistas y de quienes quieren restarle importancia a los debates de jóvenes y sobre todo garantizar su financiación adeacuada.

A mediados de año, gracias a la Universidad Nacional, publicaremos un libro sobre la Participación Juvenil en Suacha en tiempos del Posacuerdo. Un documento donde resaltaremos diversas apuestas en tantos años de luchas juveniles en nuestra ciudad.

*****

Heiner Gaitán Parra**

Soachuno. Candidato a Magister en Estudios Políticos.

Grupo de Investigación Presidencialismo y Participación.

@HeinerGaitan

Febrero 20 de 2019