Trabajadores, centrales sindicales y organizaciones sociales de Argentina, protestaron este miércoles 27 de diciembre de 2023 en la ciudad de Buenos Aires en contra de un “megadecreto” impulsado por el Gobierno del presidente Javier Milei.
La convocatoria fue encabezada por la Confederación General del Trabajo (CGT), que aglutina a los mayores sindicatos del país, a la que se sumaron la Central de Trabajadores Argentinos (CTA y CTA Autónoma), y otras agrupaciones políticas y sociales.
En horas del mediodía, miles de personas colmaron la Plaza Lavalle, frente al edificio de Tribunales. Allí, los dirigentes de la CGT entregaron un documento a la Justicia para pedir la anulación del decreto de Milei, que deroga más de 300 leyes y avanza sobre derechos laborales.
La movilización, de la que participaron miles de personas, puso nuevamente a prueba el protocolo ‘antipiquetes‘, lanzado por la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, con el objetivo de controlar las marchas, protestas y liberar las calles de cortes de manifestantes.
A pesar de un amplio despliegue que contó con la participación de las cuatro fuerzas federales -Policía Federal, Gendarmería Nacional, Prefectura Naval y Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), el tránsito en las inmediaciones del Palacio de Justicia, donde se encuentra la Corte Suprema de Justicia de la Nación (CSJN), fue bloqueado.
La marcha se desarrolló con normalidad hasta que comenzó la desconcentración. En las calles aledañas a la Plaza Lavalle, custodiadas por cientos de efectivos policiales, hubo momentos de tensión, empujones, insultos, choques entre manifestantes y uniformados y varios detenidos.
Por la tarde, en una rueda de prensa, la ministra de Seguridad Patricia Bullrich afirmó que la manifestación “fue pacífica”. Y destacó el éxito del operativo: “La Policía actuó poniendo orden ante el desorden”, aseguró Bullrich.
Mensaje al presidente Milei
Los directivos de la CGT realizaron un breve acto en el que leyeron un documento dirigido al mandatario Milei, bajo el título “Somos los trabajadores, no somos ‘la casta”, como llama Milei a los dirigentes políticos tradicionales.
La central obrera manifestó en el texto que el presidente “prometió hacer un ajuste que lo pagaría lo que él denomina ‘casta política’”, y que los trabajadores recibirían “los beneficios de ese recorte”. Sin embargo, advierten que “su primer acto de gobierno es un decreto de necesidad y urgencia que contiene muchas medidas arbitrarias, anticonstitucionales y lesivas de un vasto número de derechos civiles, comerciales y sociales”, además de que introduce “una feroz reforma laboral regresiva cuyo único objetivo es disciplinar a los trabajadores, cercenar la actividad sindical y solo privilegiar intereses empresariales”.
“Ser legal es respetar la Constitución nacional. Ser legítimo es convencer a las mayorías. Si no se respeta ese esquema se corre el riesgo de no ser respetado. Y de no ser República. No se confunda, señor Presidente. No somos la casta. Somos los trabajadores”, dice el documento que pide a la Justicia “una sentencia que declare la inconstitucionalidad del Decreto de Necesidad de Urgencia”.