El virus de Nipah (NiV) es un virus zoonótico, es decir que proviene de los animales y pertenece a la familia Paramyxoviridae, misma que produce el sarampión y la gripe aviar. Se identificó por primera vez en Malasia en 1999, durante un brote en la aldea de Sungai Nipah, de ahí su nombre.
Los murciélagos frugívoros son los huéspedes naturales del virus y pueden transmitirlo a otros animales, como los cerdos, que luego pueden infectar a los humanos.
Desde el pasado 12 de septiembre, el departamento de Información y Relaciones Públicas del Gobierno de Kerala, India, puso en alerta al mundo al notificar nuevos casos de infección por el virus zoonótico Nipah. Según informaron ya se ordenó el cierre de escuelas, oficinas y transporte público, para evitar la propagación del virus, que hasta el momento ha dejado a dos personas muertas y ha obligado a más de 130 a ser sometidas a pruebas de detección.
Ahora las autoridades de ese país y la Organización Mundial de la Salud trabajan en la prevención del virus Nipah con medidas de control de la infección y la identificación temprana de casos, dado que no existe una vacuna específica para esta enfermedad y los pacientes sufren una tasa de mortalidad de entre el 40% y el 75%, según la OMS.